Metro Directo – 6/2009

Un ‘voley’ jugado sin apenas limites

Por : Pedro Tortosa
¿Cansado de no llegar a rematar un balón jugando a voley playa? ¿De no poder dar más de un toque con el pie en el futvoley? ¿De no poder rematar de cabeza a la red desde dos metros de altura? Entonces, éste es tu deporte.

e llama bossaball y, por ironías del destino, no se ha creado en la brasileña Copacabana, sino en la centroeuropea Bélgica, donde se alumbró una actividad ante todo espectacular.

Pongamos un colchón hinchable de dimensiones importantes, similar a un campo de voley. Donde se suele situar el rematador, colocamos una cama elástica para que el remate sea el soñado. En medio, una red regulable, al gusto de los jugadores (de tres a cinco, según los que estemos) y, claro, una pelota de voley. ¿Y cómo se juega a esto? Muy similar al voley, pero con sus peculiaridades. Por ejemplo, cada equipo puede llegar hasta los ocho toques a la bola dentro de su propio campo, incluso hasta dos veces seguidas si la misma persona lo hace con el pie o la cabeza, una sola con la mano. Y en cuanto a puntuación, la novedad está en que los smash o remates que caigan en la cama elástica son premiados con tres puntos, dos más que en el resto de la cama elástica.

Para probarlo, este verano lo podremos disfrutar por primera vez en algunas playas andaluzas y gallegas.
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